NO ES LO MISMO SER BORRACHO QUE CANTINERO
Por Gabriel
Cordero
Un gran reto
tiene enfrente la exjefa del SAT, Raquel Buenrostro quien fue nombrada por el
Presidente López como nueva Secretaria de Economía ante la renuncia de Tatiana
Clouthier a este encargo para irse “a la porra”. Abrazos para Raquel y no para
Tatiana. La Tía Raquel se ha distinguido por su obediencia, sumisión y
disciplina al jefe del ejecutivo; actitudes que ahora la premian con una
Secretaría de Estado. Si en el pasado nos quejábamos de los todólogos del
PRIAN, ahora nos podemos quejar de los todólogos de la autodenominada 4T. La
Tía Raquel tuvo un excelente desempeño en exprimir los bolsillos de los
mexicanos, especialmente de los grandes contribuyentes, sin embargo nos queda
mucho a deber:
- La
página del SAT falla como nunca en sus 25 años de existencia
- El
sistema de citas ha sido un desastre desde el inicio de la pandemia. La
ineficiencia para atender este mecanismo de acceso a los servicios presenciales
del SAT, ha generado un gran foco de corrupción (esa que dice el Presidente
López que ya no existe en este bello país), al grado tal que las citas se
venden sin recato alguno por doquier.
- La
carta porte, esa gran piedra en el zapato que les impusieron a los
transportistas de mercancías por vía terrestre, marítimo, férreo o aéreo, y que
el SAT pretendió regular con una sola regla en la Resolución Miscelánea Fiscal
2021 (RMF2021) y terminó generando toda una nueva Sección en el Capítulo 2.7.
de la RMF2022, no ha quedado firme y siguen pateando el bote hacia adelante,
creando incertidumbre y más carga administrativa para los particulares. Ni qué
decir de que este es otro foco de corrupción generado en este sexenio que antes
no existía: los guardias nacionales ahora paran, un día sí y otro también, a
los transportistas para exigir la carta porte y hacerles observaciones absurdas
y amenazas de incautar la mercancía, exigiendo “ponerse la del Puebla” para
continuar su recorrido.
- Y
por último, la joya de la corona: el CFDI 4.0: el todopoderoso CFDI, eje rector
de la fiscalización en los tiempos modernos, que fue anunciado a finales de
2021 y que supuestamente entraría en vigor el 01 de mayo de 2022, también ha
sido pateado pa´delante gracias a que su implementación se la han asignado a
los plomeros encargados del mantenimiento de los baños del SAT y simple y sencillamente
no quedó listo en este año 2022.
No es lo mismo
ser borracho que cantinero: la Tía Raquel pasa de cobrar impuestos a como de
lugar a los empresarios, a un puesto estratégico en la economía mexicana. Ahora
es la encargada de generar las condiciones necesarias para que los empresarios,
esos de los que tanto se ha quejado que no pagan impuestos, hagan nuevos y
buenos negocios; y los negocios que ya existen, se mantengan; generen nuevos
empleos, exporten más mercancías, impulsar a los emprendedores y un largo
etcétera. En un país donde la vida promedio de las empresas es de 7.8 años, la
Tía Raquel tiene un gran reto.
Las cúpulas
empresariales han dado su beneplácito a la llegada de Buenrostro a la
Secretaría de Economía. Era obvio. Nadie se la va a echar de enemiga y va a
hablar mal de ella, por muy mala fama que traiga de ser una dama de hierro en
el cobro de los impuestos.
Por otro lado,
el puesto que dejó vacante la Tía Raquel, el Presidente López nombró, el pasado
lunes 10 de octubre, al Contador Público Antonio Martínez Dagnino (se pronuncia
“dañino”, esperemos que su apellido sea mera coincidencia y no un presagio. En
latín, las palabras que llevan “gn” se pronunciaban como “ñ”). El mismo lunes,
el Secretario de Gobernación le dio posesión del cargo, pasando por alto que
dicho cargo lo debe ratificar el Senado de la República, de acuerdo con el
artículo 13 de la Ley del SAT. Otro detalle importante a aclarar es la cédula
profesional del joven Antonio: de acuerdo a la consulta pública que se puede
realizar en la página del Registro Nacional de Profesionistas, la cédula
profesional como contador público avalada por la UNAM fue expedida en el año
2011. Se dice que el flamante jefe del SAT tiene 30 años al día de hoy, por lo
tanto, en 2011 tendría 19. ¿Es un niño genio que se tituló a los 19? ¿O su
cédula profesional es más falsa que los “TE AMO” de tu ex? ¿O se la mandaron a
hacer para cubrir el requisito de diez años de antigüedad que marca el artículo
13 de la Ley del SAT en su fracción II?
De ser falsa la
cédula profesional del joven Antonio, no solo no podría ser jefe del SAT,
estaríamos ante un caso similar al de Fausto Alzati y lo más interesante: si el
Presidente López necea en dejarlo, los amparos de todo documento que firme
estarán a la orden del día.
¿Tienes dudas?
Escríbeme. Twitter: @gabe_cordero
Quien le
entiende a su contador, paga menos impuestos.
¿Ya leyeron el
libro IMPUESTOS Y DRAGONES?
*Gabriel Cordero
es Contador Público, con Especialidad en Fiscal y Maestría en Contribuciones. Asesor
de empresas como la tuya. Capacitador en temas fiscales, laborales y de
seguridad social. Autor del libro IMPUESTOS Y DRAGONES, el mejor libro de
impuestos para NO CONTADORES.
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